Ni rosa ni azul, un bautizo casero en color amarillo

El presupuesto, la comodidad, el ambiente… son muchas razones por las que cada vez es más habitual realizar todo tipo de celebraciones en casa. En otros tiempos, cuando queríamos celebrar un  acontecimiento especial, lo normal era realizar un convite en algún restaurante u hotel. Pero ésta es una opción cada vez menos habitual ya que el coste es muy elevado y se prefiere un ambiente más íntimo para este tipo de ocasiones.

Por ello, en este artículo vamos a darte una serie de consejos para que decores tu hogar si quieres realizar la fiesta por el bautizo de tu hijo en tu propia casa.

El primer aspecto que se suele tener en cuenta es si el bebé es niño o niña. Puede parece algo tradicional, pero si es un chico, lo típico es dar a la decoración unos toques azules, mientras que si es del sexo contrario, la opción más habitual es hacerlo en tonos rosa o salmón. Por eso me gustó tanto el amarillo, es un color neutro ideal para un bebé de cualquier sexo y que, además, transmite mucha alegría y luz!

Los tonos que elijas se pueden usar en los manteles, los platos, las cubiertas de las sillas, etc., siempre con el objetivo de dar un toque de ambientación a la estancia. Los pequeños detalles son los que provocan las mejores impresiones, así que cuida que tanto las servilletas como los platos y, en general, todo, esté a juego.

En la pared podemos colocar una cinta con el nombre del bebé y realizar a mano unas tarjetas de visita que incluyan el menú y que, a su vez, sirvan como regalo o recordatorio del evento. Se puede decorar el resto de la estancia con globos de colores vivos y alegres que resultarán muy divertidos y llamativos si a la celebración acuden otros niños. Asegúrate también de mantener una iluminación adecuada, sobre todo si lo celebras en interior, mediante filtros de colores seguros en las lámparas, con los que conseguirás dar un aspecto cálido y tierno.