Ahora que por fin ha llegado la primavera, una buena idea es celebrar el cumple de las niñas en el exterior, y la temática perfecta son las hadas de las flores. Un mundo de ilusión y fantasía en el que no falten los duendes, los gnomos y una decoración de ensueño para su día.
Convertir una fiesta de cumpleaños en un evento inolvidable es una tarea que requiere preparación y mucha imaginación. En las siguientes líneas se aportarán ideas para lograr una fiesta casera, ambientada en un bosque de fantasía, que los más pequeños de la casa no olvidarán jamás.
En primer lugar, deberemos lograr una mesa ambientada alrededor de la cual se situarán los familiares y amigos del pequeño anfitrión. Para lograrlo, se puede escoger una mesa situada en el patio o en un lugar exterior. Las sillas simularán forma de seta, ayudándonos de cojines u otros elementos decorativos. En el centro de la mesa se situará un árbol en miniatura, con elementos cuidados tales como ventanas, puertas u otros adornos que simulen una casa de árbol. Además, se decorarán los platos y vasos con servilletas de colores pastel y margaritas.
Si disponemos de una puerta de entrada, decorarla de forma oportuna será muy fácil. Se podrá enganchar musgo alrededor, mediante cola en spray. Además, se pueden añadir adornos florales u otros elementos que inviten a entrar en un bosque de fantasía.
La comida es un elemento a cuidar en un bosque de hadas encantadas. Entre otros, triunfarán: bocadillos de pan de molde, con forma de mariposa, brochetas de frutas, con una estrella en la parte superior; magdalenas y bizcochos de colores vívidos u otros elementos dulces o salados con un toque místico y alegre. No olvides poner un nombre, inspirado en un mundo mágico, a cada grupo de alimentos.
Para terminar, convendría añadir carteles u otros elementos decorativos tales como gnomos o flores. Además, un disfraz de fairy (hada), puede ser excelente para ambientar la fiesta y para que todas las invitadas al cumple se disfracen. Con estas ideas y una pizca de tiempo, lograréis un aniversario que los más pequeños no olvidarán.