Hoy en día existen muchos juegos diferentes con los que amenizar una fiesta infantil, aunque seguro que en muchas ocasiones recordarás aquellos juegos con los que te divertías cuando eras un niño o una niña. ¿Por qué no hacer partícipes a nuestros hijos? Te vamos a recordar cuatro juegos clásicos que puedes poner en marcha en la fiesta infantil de tus peques, seguro que se lo paan en grande.
Carrera de sacos
Es uno de los juegos más divertidos que pueden hacerse porque todos los niños quieren ganar y la mecánica es de lo más sencillo. En un pasillo largo o mucho mejor en un parque o espacio público, se delimitan dos puntos, la salida y la llegada. Los niños tendrán que meterse en sacos e ir saltando hasta llegar a la meta. Quien llegue el primero gana.
El baile de la patata
Es otro divertido juego para el que hay que ir en pareja. Se necesitan varias parejas, unas cuantas patatas no muy grandes, espacio y música. Consiste en que la pareja baile mientras sujeta la patata frente con frente sin utilizar las manos. Aquellas parejas a las que se les caiga la patata pierden.
Carrera de carretillas
Este es otro divertido juego que consiste en poner un punto de salida y otro de llegada. Se juega en parejas y uno es el encargado de sujetar por las piernas a su compañero o su compañera mientras éste avanza apoyándose con las manos en el suelo. Gana el primero que llegue a la meta.
Las manzanas
Se cuelgan unas cuantas manzanas de una cuerda en horizontal y los niños que jueguen tendrán que comerse la manzana sin utilizar las manos, solamente con la boca. Quien se haya comido la manzana entera o el máximo posible en determinado tiempo habrá ganado.
¿No sientes un poco de nostalgia con estos juegos?