Sorprender a los más peques con deliciosos dulces en una fiesta es algo imprescindible y como queremos que siempre se lo pasen en grande, te vamos a enseñar a preparar unos cupcakes muy especiales con algodón de azúcar y una cobertura repleta de color.
Vamos a ahorrar bastante tiempo en hacer los cupcakes, por ello necesitaremos comprarlos sencillos, sin ninguna clase de relleno o cobertura. Para su elaboración necesitaremos los siguientes ingredientes.
- 12 cupcakes simples.
- 8 Tazas de crema de mantequilla para hacer el glaseado blanco.
- Colorante alimentario del color que elijamos (puede ser uno o varios mezclados).
- 12 palos de piruleta..
- Una bolsa para utilizar como manga pastelera.
- Algodón de azúcar de diferentes colores
El primer paso es preparar el glaseado, pero para no hacerlo sencillo, con ese color neutro que tiene, podemos utilizar el colorante alimentario que hayamos elegido. Pondremos en un bol la crema de mantequilla y le agregaremos un par de gotas del color que queramos. Debemos tener cuidado de no echar demasiado porque con apenas 3 o 4 gotas se consigue un color bastante intenso.
Una buena idea para conseguir una cobertura multicolor será echar crema en diferentes recipientes, darle el color que queramos en cada recipiente, removiéndolo bien. Una vez tengamos glaseado de varios colores, iremos metiendo cada cobertura de color en la bolsa que utilizaremos como manga pastelera.
Colocaremos los cupcakes en fila y retorceremos la parte de arriba de la bolsa para ir comprimiendo el contenido. Iremos apretando la bolsa (a la que previamente habremos cortado una de las esquinas) e iremos haciendo un espiral sobre el pastelillo.
El último paso es pellizcar un trozo de algodón de azúcar, pincharlo en uno de lo spalos de la piruleta y después clavarlo justo en medio del cupcake y ya estarán listos para consumir. Un consejo, es muy importante no dejarlos mucho tiempo preparados porque el algodón de azúcar absorberá la humedad del ambiente y se reblandecerá. ¿Os atrevéis a hacerlos?