La imaginación es una de las herramientas clave para conseguir hacer disfraces infantiles bonitos y muy originales para hacer que nuestro hijo o hija sea el centro de atención allá donde vaya. Siempre se ha dicho que los mejores disfraces son los caseros y en esta entrada vamos a darte alguna idea para que tus peques maquen la diferencia en carnaval, una fiesta de disfraces, en el cole o donde quieran.
Con cartón, unos listones de madera, pintura en spray y paciencia se puede conseguir hacer que nuestro hijo sea un auténtico piloto de aviones. La estructura no es demasiado compleja de hacer, más bien es una caja sobre la que se le añaden las alas y los demás complementos como podemos ver en la fotografía. No hay que olvidarse de poner unos tirantes anclados al avión, para que el niño o la niña pueda llevar su disfraz donde quiera.
Los macarons son una de las grandes especialidades de repostería creativa, todo un delicioso dulce parecido a una galleta rellena de crema. Si queréis que vuestro hijo o hija sea más dulce aún, podéis preparar un macaron con espuma, la cual forraréis bien como si fuese un cojín de forma redondeada. Tendréis que hacer dos partes, la frontal y la trasera, unidas ambas por unos tirantes del mismo color. Para conseguir el efecto crema, podéis utilizar una tela de volante o hacerlo a mano cubriendo el borde de ambas partes.
Con una caja blanca, unos palillos de madera y un rotulador de tinta roja podemos convertir a nuestra peque en una original cajita de comida china. Si la niña tiene el pelo un poco largo se le puede sujetar con los palillos y se puede acompañar de una camiseta y pantalón rojo haciendo juego con el resto del disfraz. ¡Adorable!
En una tienda de disfraces podemos comprar boas de plumas con las que poder preparar a nuestro retoño un estupendo disfraz de pollito. Necesitaremos una camiseta sobre la cual coser la boa de plumas amarillas (se necesitarán dos o tres boas para cubrir bien el cuerpo), con fieltro de color naranja podremos hacerle el pico y las patas y lo acompañaremos con unos pantalones ajustados o leotardos del mismo color que las plumas.